viernes, febrero 14, 2014

Bristol, Inglaterra: Ataque incendiario de la FAI a edificio del ejército británico

11 de febrero de 2014

La propaganda militar presenta a las fuerzas armadas como protectores de
“el pueblo”. Esto ha sido utilizado por las clases dominantes desde las
primeras civilizaciones, para justificar la conquista y la ocupación de
territorio, sacrificando a sus lacayxs para construir pequeños o grandes
imperios. Se supone que creamos (o actuar como como si creyéramos, al
menos) que lo que hay en los intereses de los políticos, de generales y de
los economistas, realmente son nuestros intereses.

Pero, no somos engañadxs. Esta mañana el fuego se alzó sobre Clifton desde
las dos camionetas y una gran transporte de personal, que incendiamos con
dispositivos incendiarios de baja tecnología, después de traspasar el
recinto del destacamento de la Reserva de la Marina Real en Bristol,
quienes han sido desplegados en Irak y Afganistán. Es repugnante como
estos comandos part-time creen que puede trabajar aquí con inmunidad,
mientras en cualquier parte ellxs y sus colegas asesinan, violan y
aterrorizan.

Alexander Blackman, el verdugo de la marina de Inglaterra expuesto hace
poco por sus acciones en Afganistán, es solamente un ejemplo de su amplia
y sistemática brutalidad y no la lastimosa aberración con la que es
descrito. Aparte, donde sea que se encuentre el ejército, es un símbolo de
la dominación del Estado que ellxs refuerzan. Tal vez para cualquiera con
una opinión sobre esto, calcula que el símbolo ahora está un poco
sacudido. Estos golpes de guerrillas tras las lineas, siguen siendo una
amenaza constante para los engranajes de la maquina de guerra.

Les vemos reclutando en las ciudades, colegios y puestos de trabajo,
atrayendo a las clases explotadas y excluidas con dinero manchado de
sangre, un estúpido patriotismo y la promesa de aventura, para reemplazar
su miseria con campamentos de entrenamientos de machos o las habitaciones
para tecnología de asesinato a distancia, al estilo de los videojuegos.

A pesar de los recortes, Inglaterra aun tiene el cuarto presupuesto
militar más grande en el mundo, ya que se aferra a un legado imperial de
genocidio y esclavitud. Los ejércitos de Occidente hoy son flexibles para
las guerras democrático-expansionistas, intervenciones para el
“mantenimiento de la paz” para facilitar la nueva era colonial de la
globalización empresarial, la contra-insurgencia, las maniobras
geopolíticas y el control de recursos, o preparados para la vigilancia
interna y el rompimiento de huelgas. Aquí como en Afganistán, Mali o
Libia, sus fines como siempre son los mismos: los gobernantes mienten, los
pobres mueren, el capitalismo se beneficia.

La guerra es un característica permanente del sistema global, impulsadas,
por la nueva tecnología y la organización social de masas, hacia escalas
previamente inimaginables, y es necesaria para los poderosxs tanto para el
control social como para el crecimiento económico. Guerras contra el
terrorismo, guerra a las drogas, guerra por el petroleo, pronto incluso
guerra por el agua limpia: esta es la marcha de la muerte de la
civilización industrial.  La ingrata tarea de la encerrada “paz” en la
Inglaterra “post industrial” es realmente solo hielo delgado es defendida
por el saqueo de numerosos conflictos diseñados en el extranjero sobre la
tierra, los minerales y el trabajo. Extendiendo las grietas encontramos en
este un velo, fundamos nuestro ataque en una rica herencia de alzamientos
e insubordinación.

La guerra social que existe entre nosotrxs y toda la coerción y la
explotación de la tierra, es la única guerra que aceptamos y que hacemos.
Apuntamos con el propósito de destacar las claras oportunidades para
desechar nuestra pasividad en un orden social fundado en nuestra
colaboración con lo que nos oprime. Con todos los medios disponibles nos
podemos rebelar por la posibilidad de una vida libre de autoridad,
individualmente o con aquellxs cercanxs a nosotrxs, mientras vencemos a
esxs que están constantemente depredando nuestras mentes, nuestras
relaciones y el medio ambiente. El sistema, que incluye al ejército y más,
intenta volver todo lo que amamos hacia un régimen de obediencia,
alienación e inertes mercancías. Por este motivo, ellxs deben enfrentarse
con la intolerancia y la hostilidad donde sea que anden. Deberían habernos
esperado.
Contra los juegos de poder de la élite mundial - ¡Solidaridad internacional!
Contra la militarizada paz de la Reina – ¡Guerra social!

- Grupo Motín de la FAI -

nb: Esta es la manera que escogimos para honrar la corta y trágica vida de
nuestro compañero Darko Mathers. En “este mundo que debemos dejar”, Darko
tomó un temprano escape. Solamente deseamos que él se hubiera quedado, así
un día podríamos bailar juntxs sobre las ruinas. Así como están las cosas,
lo mantenemos cerca, no por un minuto de silencio sino por una vida de
combate. Una vez más, las palabras de Bruno Filippi:

“Almas que están atormentadas por este mundo, les llamo a juntarse.
La bandera ya esta ondeando.
Es negra. Representa el luto. Adelante, entonces, locos Prometeos.
El sonido de la venganza es una dulce y querida música”

La fuerzas de seguridad homólogas de nuestro objetivo están presentes en
Rusia, reunidas en las Olimpiadas de Invierno. Recordando el gran
espectáculo de tropas y guardias en los Juegos de Londres y teniendo en
mente que el evento siempre significa represión militarizada, entre otras
atrocidades, nuestro incendio demuestra que la llama anti-Olimpiadas
perdura. También estaba fuertemente Ilya Romanov en nuestros pensamientos
cuando pasamos a la acción, quien se hirió en octubre en ese país y ahora
una vez más está detenido por lxs malditxs policías.

Nuestro apoyo total está con la indómita actitud de Mónica Cabllero y
Francisco Solar, mientras esperan el juicio por una acción directa en
Zaragoza, España. No retroceder, no rendirse. Por último, este ataque le
da la bienvenida a la explosión anarquista de los combatientes callejeros
en los black blocks  de Brazil y a las células incendiarias
internacionalistas (la FAI, entre ellas), y enviamos un saludo de todo
corazón  al Grupo de Acción Directa Internacional (GADI) en Francia y a
lxs presxs que se alzaron el mes pasado en la cárcel HMP Oakwood aquí en
Inglaterra, hermosos en su rebelión. En adelante, más fuego al Estado,
ejércitos, escuelas, iglesias, burocracias, cárceles y la civilización que
las crea.

---


Traducido por Fuego y Sombra

***
Otra traducción enviada por los compañeros de Anonimxs Liberatixs


No hay comentarios.: